Cuando vayas a regalar algo feo, chico y que te querés sacar de encima, dejá el regalo sin identificación. En estos casos, una hermosa tarjeta de felicitaciones sobra.
Corrés el riesgo de que la madre de la cumpleañera vaya el negocio para cambiarlo (¡por cualquier cosa, por Dios! Siempre va a ser mejor que eso) y allí le digan con un gesto de desprecio:
¿Eso? Sí, es de acá, pero hace un montón que no lo trabajamos. Imposible hacer el cambio
Y ella va a saber de quién vino el regalo. No te conviene, creéme. Puede tentarse y en lugar de donarlo a la iglesia, volver a regalárselo a tu hija en su próximo cumpleaños.
Jjajajja, me pasó algo parecido… Un cumpleaños me regalaron una blusa tejida de lana, en un tamaño que no me entraba… (y era obvio que no me iba a ir).
Fui a la tienda a cambiarla y…… era de liquidación y no se pod{ia cambiar… CHAN!
QUÉ MALHUMOR, CÓMO VAN A REGALAR ALGO DE LIQUIDACIÓN SI ES OBVIO QUE NO SE PUEDE CAMBIAR….!
Supongo que la secuencia fue: ¡Otro cumpleaños! ¿Qué le regalamos? Ya sé, me parece que me quedó una camperita….
Besos
OMG! tengo que repetirlo: OMG!! Gordi! que no te pase! ja ja me muero de risa!
No me pasó nunca y si me lo hicieron no me di cuenta, ahora yo digo no? puede ser que no tengas para un regalo, es entendible pero con unos chocolates del kiosco quedás mejor que con un regalo viejo… no lo puedo creer.
Por lo menos le había cambiado el envoltorio? o todavía seguía con el moño navideño?
ja ja, me hiciste reír!
Besos 🙂
No, no le había cambiado el envoltorio. Eso fue un error porque me permitió identificar el negocio 😉 El moño se debe haber perdido ya.
Besos
La cantidad de porrrrrquerías que reciben los chicos en los cumples… Hay algo que dure sano más de dos semanas?
No 🙂
Un placer verte por acá.
Que lindo dibujo
hermosicimooo ♥♥♥♥♥